El Pavimento rectificado es aquel al que se le cortan los bordes para conseguir un canto perfecto. Esta tarea se realiza justo al sacar el pavimento del horno, consiguiendo así una junta bastante más pequeña que las que tiene el pavimento no rectificado.
Las principales características del Pavimento rectificado son:
- Se puede fabricar en cualquier color.
- Podemos tener pavimento tanto con texturas lisas como con relieve.
- Tiene una instalación algo más complicada que otro tipo de pavimentos, pero nos ofrece una sensación de amplitud ya que tanto paredes como suelos parecen una sola pieza. Se puede conseguir una instalación con una separación de entre 1 y 2 mm.
- Vamos a conseguir pieza de pavimento de mayor tamaño que el no rectificado.
- Es un pavimento mucho más limpio. Al no tener prácticamente juntas, apenas se acumula la suciedad.
Desde Polvero Josele aconsejamos la instalación de este tipo de baldosas por profesionales, ya que para conseguir el efecto de una sola pieza es necesario realizar antes una nivelación perfecta del suelo o pared.